«Resulta obvio decir que la publicidad debe llamar la atención. Es una de sus obligaciones. Lo que no es obligatorio, sino todo lo contrario, es que llame la atención por sus errores ortográficos o mala sintaxis. Y eso, desgraciadamente, ocurre cada vez más a menudo».
Puedes leerlo aquí: https://lasredesdepedro.wordpress.com/2017/05/12/publicidad-mal-escrita-el-peor-impacto-para-anunciantes-y-agencias/.